(lapatilla.com) - La nueva consola doméstica del gigante nipón de los videojuegos Nintendo, Wii U, salió hoy a la venta en Japón, donde algunos establecimientos tuvieron colas de cientos de personas deseosas de hacerse con el dispositivo.

La consola, lanzada en noviembre en el mercado norteamericano y Europa, es la primera de la llamada octava generación y el primer aparato doméstico lanzado por la empresa de Kioto desde que en 2006 presentara la revolucionaria Wii, que está a punto de alcanzar los 100 millones de unidades vendidas en todo el mundo.

Wii U reproduce gráficos en alta definición con una resolución de 1080p, al tiempo que su mando, dotado de una pantalla de 6,2 pulgadas, está pensado para enriquecer y ampliar la experiencia del jugador.

La versión de 8 gigabytes ha salido a la venta con un precio recomendado de 26.250 yenes (246 euros), mientras que el de 32 gigas cuesta a partir de 31.500 yenes (295 euros).

En ciudades como Tokio, las grandes superficies especializadas en productos electrónicos registraron largas colas de clientes que esperaron pacientemente hasta que abrieran hoy sus puertas.

Frente de la tienda de la cadena Bic Camera, en el barrio tokiota de Ikebukuro, más de 300 personas, desde estudiantes a abuelos que pretendían regalar el aparato a sus nietos, hicieron cola, informó la agencia Kyodo.

Wii U ha tenido de momento buena acogida en Europa y Estados Unidos, donde vendió más de 425.000 unidades en los primeros siete días, según Nintendo.

La compañía japonesa, que espera que las ventas sean también sólidas en el país asiático de acuerdo al gran volumen de pedidos por adelantado, planea vender 5,5 millones de consolas y 24 millones de unidades de juegos para el aparato para marzo de 2013.

Puesto que la demanda supera ahora mismo a la oferta, el fabricante deberá reforzar su capacidad de producción para alcanzar dichas cifras.

La compañía busca que el lanzamiento contribuya a impulsar su rendimiento tras presentar una pérdida neta de 43.200 millones de yenes (405 millones de euros) en el ejercicio 2011 por la caída de ventas y a la fortaleza del yen.

El lanzamiento se produce en un momento de encogimiento para el mercado de software de consolas domésticas (se redujo en 2011 un 14% interanual, según datos de la editora especializada Enterbrain) y de expansión para el de smartphones y dispositivos móviles (que creció un 89%)