(engadget.com) - Dell acaba de confirmar sus planes de convertirse en una empresa de capital privado y cerrado, y para conseguirlo, contará con la ayuda de nada menos que Microsoft. Esta decisión lleva gestándose desde el mes de agosto y contempla no sólo un préstamo de 2.000 millones de dólares por parte de la firma de Redmond, sino también se financiará con ayuda de otras compañías.

El valor de la transacción completa entre los inversores, el fabricante y una empresa especializada en este tipo de maniobras llamada Silver Lake se calcula que rondará los 24.400 millones de dólares. Pese a este drástico cambio de rumbo, parece que el organigrama de la compañía no va a modificarse demasiado, ya que la nota de prensa emitida para la ocasión deja claro que Michael Dell seguirá ocupando el puesto de CEO si el acuerdo sigue prosperando.